La Batalla de Munda - 17 de marzo de 45 a. C. - (hace 2057 años) fue una victoria de los ejércitos de Julio César sobre los pompeyanos al mando de Tito Labieno y los hijos del difunto Pompeyo el Grande, Cneo y Sexto, en las llanuras cercanas a la antigua colonia romana inmune de Munda, así como la última batalla de la Segunda Guerra Civil Romana.
Se trató de la batalla más peligrosa y difícil de las batallas de César, el cual llegó a pensar incluso en suicidarse en su momento crítico. El dictador presentó batalla en un terreno desfavorable en grado sumo, al tener que atravesar un torrente y subir a la elevada colina donde se había fortificado Pompeyo el Joven. La ferocidad con la que combatió la Legio X Equestris (futura Gemina) evitó que los cesarianos fueran rodeados y permitió que desplegaran su caballería. Tito Labieno trasladó entonces sus tropas para interceptarlos, pero el movimiento fue interpretado por el resto de los pompeyanos como el inicio de la retirada, lo que precipitó el desastre. Los dos ejércitos se enfrentaron en las llanuras de Munda, en la Bætica. El ejército pompeyano estaba acampado en una colina suave, una posición desfavorable para el ataque de César. Permanecieron a la vista varios días hasta el 17 de marzo, día en el que César inició la batalla.
Libro de la colección Guerreros y Batallas de la editorial Almena con multitud de fotografías, láminas, dibujos y gráficos. Texto: José Ignacio Lago. Ilustraciones: Faustino Martín. |
La batalla duró un tiempo sin ventaja aparente para ningún lado, viéndose forzados los generales a dejar sus posiciones de mando y a unirse a la misma a fin de levantar la moral. César tomó el mando del ala derecha, donde la Legio X Equestris peleaba duramente. Su presencia elevó la moral de la X y empezó a avanzar. Dándose cuenta de la maniobra, Cneo Pompeyo desplazó una legión de su ala derecha para reforzar la izquierda, lo que constituyó un error fatal, ya que el ataque de la Legio X Equestris no era más que una treta.
Tan pronto el flanco derecho de Pompeyo fue debilitado, la caballería de César lanzó un ataque por dicho flanco que cambiaría el desenlace de la batalla. Al mismo tiempo, el rey Bogud de Mauretania, aliado de César, atacó el campamento de Pompeyo desde la retaguardia. Tito Labieno, comandante de la caballería pompeyana, se dio cuenta del ataque y se desplazó al campamento para responder. No obstante, los legionarios pompeyanos, sometidos al fuerte ataque de la X Equestris por el flanco izquierdo, y de la caballería por el derecho, creyeron que Labieno se retiraba. Temiendo lo peor, los legionarios rompieron el frente y huyeron. Muchos soldados pompeyanos murieron durante la retirada. Otros murieron defendiendo la ciudad de Munda. Atio Varo y Tito Labieno murieron, pero Sexto y Gneo Pompeyo alcanzaron la ciudad de Corduba, donde se refugiaron.
Después de esta sangrienta victoria y la muerte de los líderes de la factio pompeyana, Tito Labieno, Publio Accio Varo y Cneo Pompeyo, César pudo regresar a Roma y ser investido con la dictadura perpetua.
Trabajo realizado por
Celia Madrona Montes alumna de 3º ESO A.
IES LUIS COBIELLA CUEVAS
SANTA CRUZ DE LA PALMA.
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